Con este procedimiento lo que se hace es un raspado o lijado especial de la capa más superficial de la piel, con la finalidad de borrar o alisar la piel que ha sido dañada por ejemplo por el acné.
Sirve también para borrar cicatrices o incluso algunos tatuajes.
Se necesita realizarla en quirófano bajo anestesia local y sedación si la zona a tratar es la cara. No necesita hospitalización.
Si la zona a tratar es muy pequeña se puede hacer bajo anestesia local en consultorio.
Podemos repetir la dermabrasión en varias ocasiones.
Los cuidados de la piel son casi los mismos que para el peeling químico facial.